Si te gusta la decoración, tener gatos puede llegar a convertirse en un auténtico reto muy gratificante. Un claro ejemplo reside en elegir bien un rascador cuyo estilo visual congenie con el resto de elementos presentes en tu hogar, desde la alfombra hasta los muebles.
Otra buena muestra de ello consiste en escoger un sofá. El mismo no solo ha de congeniar con el diseño del resto de conjuntos como la mesa de centro y el mueble de televisión, sino que a su vez ha de tener una serie de características para que los mininos estén cómodos y no haya riesgo de que lo dañen.
Asegúrate de que el sofá es de calidad
A día de hoy no hace falta acudir presencialmente a un comercio especializado para asegurarte de que un sofá será de calidad. Basta con Ver Sofas para Gatos en sofavalencia, lo cual puedes hacer cómodamente desde tu propio hogar. Todos ellos se caracterizan por haber pasado un riguroso control de calidad.
Algunos fabricantes incluso hacen pruebas con animales, incluyendo gatos. El objetivo es claro: asegurarse de que si algún consumidor adquiere uno de sus sofás, el mismo permanecerá en perfecto estado.
Tela resistente ante posibles arañazos
El catálogo de este tipo de tiendas tan fiables en las que venden sofás de muy buena calidad acostumbra a ser muy amplio. Sin embargo, en lo que más debes fijarte es en la tela utilizada para recubrir la superficie. Es fundamental que la misma sea resistente a más no poder.
En la página web anteriormente mencionada hay un apartado de telas en el que se detallan las características individuales de todas ellas. Por ejemplo, la conocida como Dakar es una de las más recomendables, ya que no solo es resistente. Por si fuera poco también destaca por su tecnología waterproof.
Si bien es cierto que la inmensa mayoría de gatos hacen sus necesidades en la caja de arena que tienen destinada a tal fin, en ocasiones puede darse el caso de que acaben orinando en el sofá. Será entonces cuando agradezcas enormemente contar con un modelo que haga gala de esta tela.
Independientemente de si te decantas por dicha tela o por cualquier otra, basta con acceder a la deseada y hacer click en el botón que te muestra todos los sofás que están disponibles con esa tela en concreto.
Chaiselongue, una muy buena elección
Si tienes gatos, uno de los sofás en el que estarán más cómodos junto a ti es el chaiselongue. Son muchos los mininos a los que les entusiasma el hecho de estar tumbados encima de ti al mismo tiempo en que tú también te encuentras recostado, lo cual puedes hacer cómodamente en este producto que tanto éxito cosecha entre los dueños de gatos.
Si no tienes mucho espacio otra buena idea consiste en comprar un sofá relax de una sola plaza, también conocido como sillón. Incluso si el gato opta por estar solo en ese sillón, se sentirá muy acogido en la estructura individual gracias a los reposabrazos y tendrá menos tendencia a rascar la superficie.
Sea cual sea el sofá que compres, coloca cerca el rascador
Tarde o temprano puede llegar el momento en que al minino le entren ganas de rascar. Incluso si la tela es muy resistente y tienes puesta una funda, es probable que acabe haciendo algún daño si no lo detectas a tiempo. Afortunadamente evitarlo no es nada complicado.Simplemente asegúrate de que, en las proximidades del sofá, esté ubicado el rascador. Gracias a ello, cuando el gato sienta la imperiosa necesidad de rascar, no dudará en dirigirse directamente al elemento destinado específicamente a ello.
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