Se acerca una de las fechas más emocionantes para pequeños y mayores. Halloween es, de lejos, la fiesta más divertida del año. Disfraces y golosinas… ¿quién podría resistirse? Además, es un momento perfecto para los amantes de la decoración DIY; y es que podemos hacer todo tipo de elementos decorativos para ambientar nuestra casa. En este sentido, si hay un símbolo absolutamente representativo de esta fiesta es la típica calabaza de Halloween. Hoy te vamos a enseñar cómo hacer la tuya paso a paso.
Materiales para hacer una calabaza de Halloween
Los materiales que vamos a necesitar para hacerla son:
- Una calabaza. El tamaño no importa, aunque evidentemente las calabazas más grandes siempre quedan más vistosas. Además, se trata de un producto de otoño, por lo que será fácil de encontrar.
- Papel de periódico o un mantel de plástico.
- Un cuchillo afilado.
- Un rotulador negro.
- Una cuchara grande o un vaciador de patatas.
- Un recipiente en el que poder dejar los restos de la pulpa y las semillas para aprovecharlos más tarde.
- Un gorro de bruja. Podemos hacerlo nosotros, aunque si lo compramos hecho ahorraremos algo de tiempo.
- Lo ideal en estos casos es comprar un pegamento transparente para que no se note.
- Una vela pequeña con una base redonda.
Pasos para hacer tu calabaza de Halloween
Cogemos nuestra calabaza, que debe estar entera. Observamos bien su tamaño y dibujamos en un papel la cara que queremos hacerle. ¿Por qué dibujarla primero en papel? Porque así no nos equivocaremos. Podemos hacer varios diseños y elegir el que más nos guste.
Ahora llega uno de los momentos más complicados: abrir y vaciar la calabaza. Para empezar, cortaremos la parte superior con la ayuda de un cuchillo bien afilado. Ten en cuenta que la parte que vas a cortar será la tapa que permitirá abrirla para meter la vela. Por tanto, tiene que encajar perfectamente. Así pues, una vez separes esa parte, no sigas recortando mucho por ahí porque quizás luego no cierre bien.
Es la hora de dibujar la cara en tu calabaza ya vacía. Para ello, usa un rotulador negro. Después, con el mismo cuchillo afilado, repasa los trazos poco a poco para ir cortándolos.
Tu calabaza ya está prácticamente hecha. No obstante, puedes añadirle, además, un gorro de bruja, sin duda un accesorio muy acertado para estas fechas. Como sabemos que los gorros se caen, recomendamos ponerle unas gotitas de pegamento para que quede fijo en la parte superior. Una vez hecha, la colocaremos donde nos guste más, ya sea decorando el recibidor para dar la bienvenida a las visitas, o en el comedor, donde sin duda aportará un punto divertido.
El último paso será meter una vela y encenderla por la noche. Un consejo extra: las calabazas también pueden, si no son muy grandes, presidir una mesa de comedor. Y es que, como vemos, la decoración de la mesa en Navidad no es la única opción divertida durante el año.
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