La tendencia general de cuidar el planeta y atender mucho más a nuestro comportamiento para mantener el medio ambiente también llega a la decoración y a la forma en que te relacionas con la forma de comprar los elementos funcionales de tu hogar. En este sentido, una de las formas, cuando se estropea un electrodoméstico es acudir a una tienda de repuestos para electrodomésticos en lugar de directamente pensar en la compra de uno nuevo.
Formas de reparar electrodomésticos
Es un buen momento para que a las 3R de: reducir, reutilizar y reciclar, se añada una nueva R, la de reparar electrodomésticos. Esto es necesario que sea así, ya que de esta forma se alarga la vida útil de los aparatos eléctricos. Pero existen diferentes formas mediante las cuáles puedes reparar tus electrodomésticos, por una parte puede ser una avería de una puerta de lavadora o frigorífico, que requieren de poco tiempo y puedes hacerlo por ti mismo. Existen otras reparaciones que deben ser abordadas por profesionales por su complejidad.
Reparaciones sencillas de electrodomésticos
Cuando en un electrodoméstico se produce una avería sencilla, tienes dos opciones, o bien asumir tu la reparación o enviarla al servicio técnico. La valoración para poder decidir cuál de las dos es la mejor opción, va a depender de tus conocimientos para poder asumir por ti mismo la reparación y también del coste que puede significar para ti. Por ejemplo, cuando se estropea, el mecanismo de cierre de una puerta de lavavajillas, o toca cambiar los fungibles de un calentador.
Si eres manitas y te gusta el bricolaje, es posible que mirando un tutorial o con la ayuda del personal de tu tienda de confianza puedas asumir estas reparaciones por ti mismo y las puedas hacer. Existen multitud de averías que puedes evitar gastar más dinero, haciendo un pequeño esfuerzo que puede servir no solo para arreglar el electrodoméstico sino para evitar que debas comprar uno nuevo, con el mayor gasto que esto te podría producir.
Reparaciones complejas
Sin embargo, existen algunas reparaciones que es mejor que sea un profesional o un servicio técnico el que las entome. En estos casos, debes ser claro e incluso si no hay muchas diferencias en el presupuesto con la compra de un nuevo electrodoméstico, piensa en el planeta y es mejor que optes por una reparación. Es una tendencia eco que cada vez más usuarios hacen servir.
Incluso en el caso que las reparaciones complejas sean costosas te pueden aportar diferentes beneficios que te pueden ayudar mucho:
- Aprovechar garantía: Si tu electrodoméstico se encuentra en garantía, o tienes un plan de mantenimiento más largo que la propia garantía donde pueden entrar este tipo de reparaciones, es recomendable que lo utilices para repararlos.
- Alargar la vida útil de tu electrodoméstico: Existen tablas donde se calculan la vida útil de los electrodomésticos, conviene que las consultes para saber en qué punto estás y si puedes alargarla optes por la reparación.
- Regla del 50%: Ligado al punto anterior, existe una regla para poder saber cuándo es mejor reparar o comprar un nuevo electrodoméstico. Es un sencillo cálculo donde necesitarás la tabla de vida útil que puedes encontrar en la red. La regla es que si tu electrodoméstico está por encima del 50% de su vida útil y la reparación cuesta un 50% más de lo que cuesta uno nuevo, es mejor comprar, de lo contrario, repara.
Más consejos para reparar electrodomésticos
Reparar electrodomésticos no es solo una cosa necesaria para poder utilizarlos puede ser también una fuente de ocio para ti. Si eres de los que te gusta disfrutar del bricolaje, la reparación de un electrodoméstico puede ser uno de esos retos que puedes superar buscando información o incluso siguiendo un pequeño manual que puedas encontrar en Internet. De esta forma, se convierte en una actividad que incluso puede ser divertida y te va ayudar a ahorrarte un poco de dinero.
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